Querido Armenia, te amo

Te amo. Te amo profunda e íntimamente. Siempre fuiste parte integral de quién yo era. Crecer aprendiendo sobre tu pasado, aprendiendo tu idioma y admirando tu belleza desde lejos. Tu importancia me fue inculcada desde muy joven. Sin embargo, todo parecía superficial y como un cuento de hadas, sin ser consciente de tu verdadera realidad. Cerrado a tus luchas y penurias, a tu pobreza y desigualdades. Sólo lo bello yacía dentro de mi visión.

Sin embargo, a medida que crecí, conocí la realidad de tu situación y comprendí mejor tu profundidad. Comencé siendo un niño de 13 años, en un viaje de cuento de hadas con mi familia, sin ver la desigualdad dentro de ti; pero luego sentí, que esa historia que una vez me contaron, era en realidad un objeto tangible.

Cuando era casi adulto, volví a disfrutarte bajo una luz diferente con mis amigos. Luego regresé nuevamente e interactué con tu juventud y tu gente, obteniendo una pequeña muestra de tu realidad y tu vida cotidiana. Esperando saber y comprender más, pensaba enmi mente que volvería pronto para poder probarlo de verdad.

UN VERDADERO SABOR QUE TENGO

Viajando a lo largo y ancho hasta donde tus brazos puedan estirarse. Al vivir en varios lugares diferentes, entendí lo diferente y única que es cada parte de ti. Qué sagrada eres y cómo todas esas historias que alguna vez me contaste en el pasado quedaron alejadas de tu realidad diaria. Caminé, hablé, aprendí tu idioma, entendí a tu gente, entendí tu lucha (externa e interna) y obtuve una visión invaluable de mí mismo y de tu alma. Paz como ninguna otra se encuentra dentro de tus montañas y en las casas de tu gente cálida y tan dispuesta a darlo todo, incluso si estuvieran a riesgo de perderlo todo. Lamentablemente, ese riesgo se hizo realidad poco después.

Desde pasar de lo más alto de todos los tiempos y ver el hermoso futuro que te espera, hasta vivir tus días más oscuros. No podía esperar más en mi vida cómoda y segura mientras tú sufrías. Llegué a estar donde necesitaba estar. Justo a tu lado, listo para cualquier cosa que me llamen. Sin miedo, sólo mente clara y muy tranquila. Entonces supe que necesitaba estar ahí para ti. Nuestros días más oscuros siguieron después de tantas pérdidas y tragedias que golpearon tan cerca de nuestros corazones. No sabía qué hacer. No pude dejarte. Quería encontrar una manera de reparar nuestras heridas, encontrar el amor en un nivel cada vez más profundo, crecer unos con otros y buscar la mejor manera para nosotros. Y encontré una manera, lo hice.

ME HAS CAMBIADO PARA SIEMPRE

Me has enseñado cómo amar, cómo explorar, cómo ser valiente, cómo aprender, cómo procesar el dolor, cómo darle importancia a las cosas que importan, cómo estar ahí para los demás, cómo estar orgulloso de quién soy. , cómo trabajar duro, cómo crear vínculos poderosos, cómo ayudar a los demás, cómo actuar una vez que se me pide y cómo encontrar un propósito en mi vida. Gracias por hacerme el ser humano que soy hoy. Te amo intensa y profundamente, mi Armenia.

Te amo,

Varak Ghazarian