Descubriendo personas en lugar de buscar una identidad

Vayamos un momento al 2020. Todos todavía sentimos las heridas frescas que infligieron en la nación armenia. Para muchos, incluido yo, los eventos que se desarrollaron en Armenia y Artsakh en el otoño del 2020 desencadenaron una crisis de identidad. ¿Qué significa ser armenio? Yo fui afortunado de crecer en una diáspora fuerte con muchas escuelas armenias, iglesias, negocios, eventos culturales, etc. Aun no me hacía sentir que la respuesta a mi pregunta la podría encontrar ahí; faltaba una conexión. Entonces, se sintió natural buscar de dónde vienen los armenios. Birthright Armenia parecía el ticket perfecto para ingresar al país y con suerte, podría ayudar a calmar mi estrés.

Un poco más de dos meses acá, no pretendía encontrar una respuesta completa. Lo que encontré en cambio fue gente, mi gente. Por más obvio que suene, refugiado en nuestra lejana diáspora, había olvidado que hay más en Armenia que la tierra, las montañas, los sitios históricos y el Lago Sevan. Todo ello probablemente no tendría un gran sentido si no fuera por las personas que viven allí. Grandes personas, malas personas, algunos muy inteligentes, otros dolorosamente indiferentes, repatriados, futuros migrantes. Todos ellos eran armenios (e incluso, algunos de ellos no armenios). Por el contrario, parecía que mi pregunta se volvía más complicada para responder a medida que me iba quedando más tiempo en Armenia.

REALIZAR VOLUNTARIADO EN GYUMRI CON BIRTHRIGHT ARMENIA

Estuve la mayoría de mi tiempo de Armenia en Gyumri, una ciudad que nunca había visitado antes. En menos de una semana, era como si hubiera pasado gran parte de mi vida allí. Por razones que son difíciles de escribir, Gyumri se sentía extrañamente familiar y armenio, más que en cualquier lugar del mundo. Capaz porque todas las expresiones de cultura eran fácilmente accesibles en cualquier lugar de la ciudad, como galerías, talleres de arte, y clases de danza armenia. O capaz, debido la cálida hospitalidad de los Gyumretsis, donde alguna persona que conociste hace un momento podría invitarte a su casa, servirte un café, dulces, y deliciosas sandías mientras intenta encontrarte pareja. Muy rápidamente, intentando buscar una respuesta a mi pregunta candente, ya no parecía tan importante. Estando acá y experimentar historias con armenios, tanto locales como de otros lados del mundo, algunas trágicas y otras divertidas, calmaron mi crisis de identidad.

ES TODO SOBRE LA GENTE

Pasando cierto tiempo acá, se siente como una trampa, donde irse se vuelve extremadamente difícil y doloroso cuanto más tiempo te quedas. Para el tiempo que se publique este artículo, ya habré regresado a Canadá, dejando atrás con tristeza algunas de las personas más inspiradoras y maravillosas que conocí. Aunque también me fui con mi mente en paz, sabiendo que construí fuertes conexiones con personas de Armenia y de la diáspora, que me encadenaron con la nación armenia y la cultura para siempre.